Corremos el riesgo de convertirnos en el campo de batalla de todas las mafias de Latinoamérica
A medida que otros países adoptan posturas más firmes frente a la criminalidad, las bandas delictivas se desplazan hacia naciones con menor resistencia, como Chile. Estamos recibiendo decenas de miles de criminales que llegan a Chile desde Colombia, Venezuela y Ecuador. Esta situación nos expone a la posibilidad de convertirnos en el campo de batalla de casi todas las mafias de Latinoamérica.