Reforma a la ley antidiscriminación
2 años resistimos, en minoría, la embestida totalitaria de la izquierda, para aprobar una reforma a la ley antidiscriminación, que invierte la carga de la prueba, penaliza la libre expresión y sanciona incluso «omisiones», todo ellos desde una perspectiva «interseccional» (posmarxista). A ello se suma la creación de más burocracia, donde ubicar a los activistas. Al final, se aprobó este pésimo proyecto. He aquí mi última intervención.